DEFINE TU CV

Si no has redactado tu CV, en esta sección te dejamos un modelo de curriculum vitae, basado en el modelo de curriculum europeo Europass. No obstante, recuerda que este documento es un simple modelo, que deberás adaptarlo a tus habilidades y a la oferta a la que quieras presentarte.

Descargar modelo de CV Europass

¿Listo para preparar tu CV?

A continuación ofrecemos un decálogo de consejos para redactar un CV más atractivo y conseguir que se fijen en ti:

Véndete.
El CV y el documento son tu carta de presentación ante la empresa, por lo tanto debes cuidar tanto el contenido (tus méritos profesionales o académicos), como el aspecto del documento.
Piensa detenidamente en tu historial académico y laboral, y subraya aquellos aspectos que te permitan diferenciarte de otras candidaturas.
Organiza los contenidos en apartados, ordena la información, cuida la redacción y la ortografía.
Personaliza tu CV para cada oferta de trabajo a la que te presentes.
Si respondes a una oferta concreta, evita enviar un CV estándar, ya que ello denota cierto desinterés.
Lee con atención la oferta de trabajo, y resalta en tu CV aquello que la empresa considera imprescindible o valorable. Por ejemplo, si la empresa considera importante un buen nivel de euskera, apunta en tus datos personales tu nivel de euskera. Si la empresa exige ciertos años de experiencia, comienza la relación de tus méritos con tu experiencia profesional.
Sé breve.
Intenta resumir tu CV en una o dos páginas.
Señala tus datos personales.
Comienza tu CV añadiendo tus datos personales, indicando al menos tu nombre y apellidos, teléfono de contacto y correo electrónico.
Otra información de interés puede ser tu localidad de residencia, así como tu edad o fecha de nacimiento.
Señala en tus datos personales otra información de interés.
Si la oferta de trabajo lo exige, puedes incluir tu nivel de idiomas, tu carnet de conducir o tu titulación académica como contenido anexo a tu información personal.
¿Qué añado antes: la formación académica o la experiencia profesional?
Esta es la pregunta que siempre surge cuando se prepara un curriculum. La respuesta depende de la persona y de la oferta de trabajo:
Si una oferta requiere una amplia experiencia laboral, o si tu fuerte son tus años de experiencia realizando una o varias funciones en diversos trabajos, cita primero tu trayectoria profesional.
Si eres una persona sin mucha experiencia laboral, o tu CV es atractivo y brillante, cita primero tu historial académico.
No ordenes cronológicamente tu historial, sea laboral o académico.
Cuando expliques tu trayectoria laboral o académica, cita aquella información que más se ajuste a la oferta de trabajo a la que te vas a presentar.
Organiza la información laboral o académica en forma de fichas.
Organiza la información como un listado o una tabla, y para cada apartado, resume todo el contenido como si fuera una ficha, de manera similar al modelo que te proponemos.
El contenido mínimo que debes citar en cada ficha es:
- Título de la experiencia laboral o académico.
- Empresa o centro educativo.
- Localidad.
- Período (o años de duración u horas).
Adicionalmente, puedes explicar brevemente las funciones del trabajo o el contenido de los estudios realizados.
¿Cómo demostrar mi dominio en idiomas?
No todas las ofertas de trabajo lo exigen y lo valoran, por lo tanto, si no tienes un nivel alto de idiomas, no tienes por qué añadirlo.
En caso de querer especificar tu nivel de idiomas, es evidente que lo mejor es aportar una titulación cualificada oficial.
A pesar de todo, si no dispones de dicha cualificación pero deseas evidenciar tu conocimiento de idiomas, te recomendamos adjuntar un listado o tabla que evalúe tu nivel de idiomas en cuatro aspectos: comprensión lectora, comprensión oral, escritura y conversación. Los niveles pueden ser: básico, medio (o avanzado), alto (o muy avanzado), nativo/a.
Puedes revisar la tabla en el modelo de CV que te adjuntamos.
Habilidades técnicas, sociales y organizativas.
En el modelo de CV europeo, se adjuntan estos tres apartados que no son obligatorios, aunque según la oferta y sus requisitos, puede resultar interesante incluirlas. Por ejemplo, si una oferta de trabajo requiere el uso de ciertas aplicaciones informáticas.
En todo caso, y aunque no las adjuntes al CV, te recomendamos que reflexiones sobre dichas habilidades. Posiblemente, en la entrevista de trabajo hagan preguntas sobre ellas.